Terapia acuática y ataxia

La ataxia es un signo clínico que está presente en patologías de diverso origen: hereditarias, degenerativas, a causa de infecciones/ tumores o a causa de un ACV; en el que se presentan características tales como: alteración de la postura y equilibrio, falta de coordinación en los movimientos voluntarios, dificultad para caminar, y temblor entre otras. En gran medida, estos síntomas se ven influenciados por un sistema vestibular completamente desmodulado, y que con cierta frecuencia, les hace enfrentarse a situaciones de caída, ya que no generan ajustes posturales anticipatorios de forma correcta.

En este sentido, la terapia acuática resulta beneficiosa ya que la fuerza de flotación del agua y la presión hidrostática, ayudan a ralentizar el movimiento, y las entradas sensoriales proporcionadas por la viscosidad del agua facilitan el reclutamiento muscular. Por lo tanto, el agua proporciona un entorno de entrenamiento seguro, de bajo riesgo y que puede ser ventajoso para que los pacientes atáxicos participen en actividades de una manera más independiente, sin el riesgo o el temor de caerse.

Por otro lado, en muchas ocasiones, los pacientes con ataxia tienen un bajo tono en la musculatura axial (zona de tronco y abdomen), lo que les hace ser inestables y aumentar el tono de musculatura de brazos y piernas, generando rigidez. En el medio acuático, contamos con numerosas opciones de trabajo de la musculatura axial en posiciones muy diversas, que resultan complicadas de realizar en el medio terrestre, pudiendo trabajar de forma específica esta musculatura tan importante.

Otro de los hándicaps que encontramos en estos pacientes es la imposibilidad de realizar movimientos selectivos con las manos a causa del temblor, lo que limita en gran medida sus actividades diarias, tales como beber de un vaso sin derramar el contenido, utilizar los cubiertos o tener una higiene correcta. Respecto a este punto, el agua genera un medio de sostén para el miembro superior y facilita el trabajo fino de la mano, utilizando materiales como aros, pelotas de diferentes tamaños o corchos que imiten de alguna manera esas actividades domiciliarias, lo que reduce la frustración y prepara el cuerpo para su posterior transferencia al medio terrestre.

Estos pacientes suelen encontrar dificultad para los desplazamientos, y muy comúnmente son dependientes de una segunda persona para caminar, no siendo así en el medio acuático, donde se pueden desarrollar retos de mayor complejidad, y llegar incluso a conseguir el nado, con lo que esto representa a nivel motivacional para el paciente siendo sumamente positivo en su proceso rehabilitador.

A forma de resumen, el tratamiento de la ataxia históricamente se afronta desde la neurorrehabilitación y las aportaciones de la terapia acuática resultan muy interesantes. Estas se basan en:

• Nivel sensoriomotor:
  • Estimulación de nuevas referencias sensoriales al tener nuevas experiencias perceptivas en el medio acuático.
  • Permite explorar la gran variedad de estrategias y sinergias motoras disponibles, para ajustar cuales son funcionalmente más significativas para el desarrollo del paciente.
  • El uso de elementos tales como ropa, bolsas o corchos, aumenta la entrada sensitiva.
• Nivel cognitivo:
  • Se promueve la atención, percepción, memoria y la regulación emocional de sentimientos como la frustación.
  • Aumento de la motivación y la independencia.
• Nivel entorno:
  • El agua ofrece un tiempo de reacción superior que el medio terrestre, lo que permite a los pacientes atáxicos disponer de más tiempo para seleccionar el movimiento y ejecutarlo, disminuyendo la impulsividad, y consiguiendo regular los movimientos para convertir movimientos globales en movimientos más específicos.

Las posibilidades que ofrece el agua además, pueden ser extrapoladas al medio terrestre, ya que las sensaciones han sido percibidas de una manera potente dentro del agua y la confianza aumenta al sentirse más seguros frente a desequilibrios o caídas, teniendo así la posibilidad de experimentar movimientos que en el medio terrestre muy probablemente no se podrían haber llevado a cabo.

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