PIDE TU CITA POR WHASTAPP

911560944

Nadando contra corriente

Hoy estoy especialmente indignada y os voy a contar el motivo:

Como bien sabéis los que nos seguís por el Facebook o por la web, habíamos comenzado una nueva actividad que consistía en hacer fisioterapia en el agua. Bueno, pues todo fue fenomenal, los pacientes estaban encantados porque el beneficio del agua en el tipo de pacientes que tenemos es más que obvio y todo parecía estar de cara, las condiciones de la piscina que habíamos elegido eran las perfectas para este nuevo proyecto en el que nos habíamos embarcado, y reunía prácticamente todos los requisitos indispensables para tratar a nuestros pacientes.

Hasta ahí todo genial. Todos nos amoldamos a los horarios que había disponibles y todo parecía que iba a ir sobre ruedas. Nuestra compañera Eva, que era la encargada de llevar el proyecto a buen puerto, estaba emocionada y volcada totalmente en que esto saliera bien, y sin duda le puso toda la pasión y la profesionalidad de que era capaz (que ya os digo yo que es mucha) en que todos pudieran apreciar lo beneficioso que la terapia acuática.

Y repentinamente todo se tuerce. Los trabajadores, curiosos por la peculiaridad de nuestro trabajo, preguntan y se interesan. Sin embargo, aun manifestándose agradecidos y encantados de ver la particularidad del ejercicio, parece que algo «no cuadra» en lo que la normativa establece. Y aquí empieza el principio del final. Aquí aparece el conflicto. Tras una reunión con el Sr. Director del centro deportivo, se nos deniega el uso de estas instalaciones. Nos alegan que la piscina es deportiva, y no terapéutica, y que somos un servicio particular con ánimo de lucro y que no lo pueden permitir.

Intentamos dar una solución proponiendo constituirnos como asociación, pero no parecía gustarle mucho el hecho de que estuviéramos allí, fuera cual fuera nuestra condición. No entendemos muy bien si es el «atender de forma individualizada», el «adaptarnos a cada paciente según sus necesidades», el «preferir no tratar a todos por igual en grupo, dándoles a cada cual la importancia real e indispensable que merecen», el «diseñar a medida», el «son personas únicas y diferentes», … o el vernos con exceso de ilusión y sin el interés que prima hoy en día, el dinero.

Ahí se supo lo que en un primer momento se enmascaró detrás de la excusa de «sois una empresa con ánimo de lucro y esto está prohibido». Ahí se supo que era una cuestión de mala voluntad. Porque el ser humano no concibe que haya gente que lucha por ejercer su profesión de la mejor manera, por dar un servicio de calidad para la gente que lo necesita, porque ¡no lo olviden! ellos no lo eligen. Algunos seres humanos, no conciben que haya un sector de la población que tiene los mismos derechos que ellos a recibir una atención digna, sin que eso suponga un lujo.
Señores, estamos hablando de SALUD. La fisioterapia no es un artículo de lujo. Y sí, desgraciadamente, somos las pequeñas empresas las que cubrimos este servicio destinado al conjunto de ciudadanos, sea cual sea su condición o estatus.

En resumen, a día de hoy no podemos dar el servicio y poco más que nos “han sugerido” que no volvamos por allí, ni si quiera abonando nuestra entrada y utilizando estas instalaciones en horario de uso «al público».

Y lo cierto y verdad es que cada día me asombra más la incapacidad humana para empatizar con personas con ciertos problemas físicos o psíquicos, o de cualquier otra índole, nos da igual el prójimo, solo pensamos en nosotros, solo en nuestro beneficio, no en el del resto de gente, y les recuerdo que esa piscina en particular, es municipal, y es de todos, y tanto derecho tienen unos, como otros a ir, y utilizar las instalaciones como mejor les parezca (siempre dentro de las reglas que ellos marcan, claro) , y estoy por asegurar que las personas que nos han negado allí nuestra presencia, seguríiiiiiiisimo que nunca han vivido en primera persona el tener cerca a alguien con un daño cerebral, si esas personas hubieran tenido un caso en su familia, en su entorno, entre sus amistades, seguro que no pensaría lo mismo, pero claro, no vemos la paja en el ojo ajeno, no señor, nos da igual realmente lo que le pase a ese paciente que está en el agua con movilidad limitada, siempre y cuando no sea yo al que le ocurra.

Desde aquí, desde este muy humilde blog, pido un poquito más de empatía, porque mañana, podemos ser cualquier el que esté en esa situación, sí, cualquiera, porque esas personas que habéis visto en la piscina, tenían un vida plena igual que la tenéis vosotros, igual que la tenemos todos, y un cierto día, se les truncó, y ya tienen bastantes trabas y palos delante de sus ruedas para que el resto de los humanos les pongamos aún más.
Solo pedimos una piscina donde poder hacer una terapia beneficiosa, donde gente como nuestros pacientes se sientan por unos momentos sin el peso de sus problemas físicos, si entre todos podemos hacer capaz que esto salga adelante, tal vez también aliviemos nuestras dificultades mentales ante ciertos problemas de nuestro prójimo, porque de verdad, pensad por un momento, que el prójimo podemos ser mañana nosotros o alguien allegado a nosotros, y os puedo asegurar que es muy complicado remar contra corriente, pero LO VAMOS A CONSEGUIR, entre todos,

Una canción de Fito dice: “Lo contrario a vivir, es no arriesgar”, pues nosotros vamos a arriesgar y vamos a apostar para que nuestros pacientes puedan, de alguna manera VIVIR.

Ojalá muy pronto pueda escribir de nuevo que hemos encontrado una nueva piscina y que puedo ver de nuevo sonreír a Gheorghe, o a Lola, o a Clementino o a otras tantas personas disfrutando del servicio que nos ofrece el agua bien empleada por una profesional como nuestra compañera Eva. Ánimo Eva, que todos te vamos a ayudar y todo irá bien ;-)

P.D. Quiero agradecer a mi compañera Eva que me ha ayudado a hacer este blog, y que lo ha completado, con un muy buen criterio, con opiniones basadas en la mala experiencia que ha tenido con la piscina que utilizábamos. Gracias, Eva, por tu aportación aquí, en el blog, y por la aportación humana que me haces cada día que paso a tu lado.

AUTOR

Beatriz Castañares

Fecha de publicación

22 octubre, 2014

Temas relacionados

ARTÍCULOS

TRATAMIENTOS

PREGUNTAS FRECUENTES

Ir arriba