Buscando nuestro mar
Quiero empezar este blog escribiendo un párrafo de una entrevista a un escultor español y catalán, Jaume Plensa, uno de los más importantes del mundo, aunque a muchos nos suene a chino, porque ya se sabe que casi nadie, desafortunadamente es profeta en su tierra. En la entrevista dice algo que me encantó y que quiero compartir con vosotros:
“.- Cómo es posible que un hijo del Mediterráneo como tú, no sepa nadar?
.- Porque no floto. Mi madre me llevó a clases a todas las piscinas de Barcelona. Yo era un genio cuando tenía la mano del profesor debajo, pero cuando la sacaba: glu, glu, glu. Al final concluyeron:”Este niño es muy pesado, no puede flotar”. Eso fue una frustración para mi. Hasta que un día llegué al Mar Muerto en Israel, donde sigo yendo mucho, y entonces, nadé como un pez. Así que mi madre hizo lo que pudo, pero se equivocó en una cosa: nunca me llevó al mar adecuado. Esto ha sido una lección muy interesante para mí: NO SE PUEDEN SOLUCIONAR COSAS EN LUGARES EQUIVOCADOS.
Uno puede ser extraordinario aquí y no serlo en otro lugar. Creo que lo fundamental en cada ser humano es hallar el lugar donde eclosionar. CADA UNO HA DE ENCONTRAR SU MAR”
A veces nos emperramos en no avanzar y en anclarnos en nuestros problemas, no soltamos lastre, no vemos más allá del mismo problema, no somos capaces de centrarnos en lo importante, en buscar la solución.
Aquí en la clínica, y seguro que alrededor nuestro, tenemos gente con dolores, problemas familiares, laborales, personales, e intentamos estar a su lado para aliviarle la pesada carga que todo ello conlleva, pero la solución está dentro de cada uno, y no vale rendirse, no vale no pelear, no vale estar pasivo.
Jaume en esta misma entrevista dice: “Qué es más importante como motor para hacer posible algo, el pensamiento o la acción? .- Para mí lo más importante es la acción. Cuando piensas mucho que hacer no lo haces nunca. Yo prefiero equivocarme a dejar de hacer. La vida es acción, constante movimiento”
Y cada uno tenemos que buscar ese motor que nos activa y que nos hace avanzar. A algunos ese motor puede ser la familia, para otros, los hijos en si mismo, o las ganas de descubrir cosas, las de vivir experiencias, también los hay que su motor propiamente dicho es simplemente algo tan importante como sobrevivir, salir de una enfermedad, VIVIR.
Y si hablo en el plano personal, para mi uno de mis motores fundamentales es sin duda el AMOR. Sonará a cursilada, entiendo que os suene así, pero que le voy a hacer, será que soy cursi, y para mi es necesario sentir y hacer sentir, querer y dejarme querer, necesito dar y recibir un abrazo a tiempo, una palabra amable, una sonrisa sincera, necesito nutrirme de aquellos que me quieren y necesito agradar a aquellos que me necesitan…, no se si lo consigo siempre.., seguro que no, y desde aquí pido perdón por ello, pero os puedo asegurar que lo intento.
Otra frase de Jaume dice: “Alguien como William Faulkner (narrador y poeta estadounidense) escribió una cosa que me tocó mucho cuando era joven: “Me resisto a creer que venga al mundo solo para resistir, estoy aquí para trascender” Yo también lo creo. Creo que estamos aquí para dejar un perfume, un rastro. Fíjate que a veces por lo que más recordamos a las personas que amamos es por el olor de su cuerpo.”
Es necesario que cada uno encontremos nuestro cometido en la vida buscando ese cometido en lo más profundo de nuestro ser y en el lugar adecuado, y dejar nuestro propio perfume, nuestro rastro vital, que te recuerden por algo, porque nadie se olvida si sigue en el recuerdo de alguien.
Perdonadme que hoy haya parafraseado esta entrevista de Jaume Plensa, creía que podría ser importante para vosotros como lo ha sido para mí al leerlo. Y sobre todo quiero desde este pequeño rincón dar aliento, ánimo, arrojo, bravura, coraje, energía y desear a todos aquellos que estéis hoy en día luchando por encarrilar vuestra vida, por encontrarle sentido a las cosas, por mantenerse, continuar, permanecer y luchar por algo tan grande como es VIVIR, que se puede, hay que seguir luchando, no hay que rendirse nunca, rendirse es fallecer, y es mejor fallecer en el intento, que no intentar volver a nacer.
Sed valientes, se puede tener miedo, es lógico ante ciertas situaciones, pero ese miedo se aminora cuando uno es consciente de sus límites y conocedor de sus posibles metas, luchemos entonces por ellas, y seguro que lo conseguiréis.
Este blog es para aquellos que necesitáis un empujoncito en estos momentos difíciles. Vosotros sabéis quienes sois ;-) , Estamos con vosotros SIEMPRE.
