La electroterapia es la parte de la fisioterapia que utiliza una corriente eléctrica con fines terapéuticos. Es un complemento más del tratamiento manual que, según la patología y la evolución de la misma, se utiliza con fines analgésicos, antiinflamatorios, excitadores (para potenciar la musculatura) o térmicos.
El ultrasonido es un equipo que transfiere ondas mecánicas de mayor frecuencia que las del sonido, a través de un medio físico (gel de ultrasonido), que permite que pueda propagarse y transmitir energía (calor profundo) gracias a la vibración que producen dichas ondas.
Es la generación de contracción muscular mediante impulsos eléctricos, los cuales se generan en un dispositivo, y que a través de unos electrodos situados sobre la piel del sujeto, se estimula la contracción.
El aparato de Electroestimulación produce un tipo de corriente eléctrica para lograr el impulso eléctrico justo para generar la respuesta motora.
Es una forma de electroterapia de baja frecuencia que desencadena la puesta en marcha de los sistemas analgésicos, es decir, de disminución del dolor.
Se aplica mediante unos electrodos situados sobre la piel, en la zona a tratar.
