La Terapia Acuática o Hidroterapia es una modalidad tratamiento dentro del ámbito de la rehabilitación cuyas técnicas, abordajes y ejercicios son desarrollados por un especialista dentro del agua, con el fin de prevenir, tratar, o recuperar determinadas patologías. Es un procedimiento terapéutico que combina el efecto de la inmersión, con el trabajo específico de la fisioterapia, dando resultados altamente satisfactorios en el tratamiento de las lesiones.
¿POR QUÉ EN EL AGUA?
El agua, por sus distintas propiedades físicas, es un medio que genera un sinfín de oportunidades únicas.
La presión hidrostática da soporte y ayuda al paciente a trabajar de manera más activa sin riesgo a caerse, permitiendo así la realización de un tratamiento de “Hands Free”. Así mismo, mejora el retorno venoso y la capacidad ventilatoria.
Por otro lado, el empuje de la flotación es un estímulo sensorial permanente que, gracias a su constante variabilidad, mantiene alerta al sistema nervioso y el cuerpo se vuelve fisiológicamente más activo facilitando así la elaboración de respuestas motrices (reacciones de equilibrio y enderezamiento) muy deficitarias en numerosas patologías.
Además, este empuje del agua (resultado de la diferencia de densidades), permite jugar a asistir o resistir un movimiento, mejorando así la movilidad articular y/o el desarrollo de fuerza y resistencia muscular.
Por último, la posibilidad de crear flujos y turbulencias (factores hidrodinámicos) combinado con las propiedades anteriores, igualmente aporta un sinfín de beneficios
¿QUÉ PATOLOGÍAS TRATAMOS?
Alteraciones músculo-esqueléticas
Trabajamos sobre lesiones de origen traumatológico, por un golpe, cirugía, o proceso inflamatorio. Este tipo de lesiones, afectan a la estructura de nuestro aparato locomotor, constituida por los músculos, tendones, ligamentos, huesos, discos, cartílagos, etc. Y, principalmente, causan dolor y limitación del movimiento y la funcionalidad.
En el agua, se favorece el drenaje del edema inflamatorio. Además, por el efecto hidrostático y otras propiedades del medio, la persona puede ganar mayor rango de movimiento articular y recuperar el funcionamiento de su cuerpo con más rapidez y sin tanto dolor.
Alteraciones sensitivo-motoras
Intervenimos desde dentro del agua, sobre problemas de movilidad, derivados del sistema nervioso. Utilizamos el sostén del medio, para dotar al paciente de más recursos en el control de su equilibrio y movimiento, y favorecer así su independencia. Así mismo, aprovechamos el entorno multisensorial de la piscina, para estimular sistemas que limitan la autonomía del paciente, con el objetivo de mejorar sus capacidades y garantizar una buena calidad de vida.
Otras
Utilizamos esta terapia también en afecciones cardio-respiratorias, embarazo, 3ª edad, para tratar de forma distinta las consecuencias físicas y fisiológicas derivadas de esas situaciones, y poder aportar un estado de salud óptimo a la persona.
Trastorno del equilibrio por envejecimiento
Enfermedades cardiovasculares
Enfermedades respiratorias
¿CÓMO TRABAJAMOS EN LA TERAPIA ACUÁTICA?
El desarrollo de la actividad va precedido de una evaluación fisioterapéutica en sala y otra en piscina, realizada por un profesional especializado en este ámbito, y sustentada en el empleo de escalas validadas para cada medio, que variarán según el tipo de patología del paciente.
Una vez detectados los problemas principales susceptibles de mejorar con terapia acuática, se establecerán una serie de objetivos conjuntamente con el paciente, y se elaborará un plan de intervención individual en el agua, basado en el concepto Halliwick y de Terapia Acuática Específica (WST), y complementado con métodos como “los anillos de Bad-Ragaz”, Ai-Chi, Aqua-T Relax, Watsu, y Natación Terapéutica.